Cada mes, más de quince padres catalanes denuncian maltratos por sus hijos a la policía catalana

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En la imagen, Ultraseparatistas fanáticos excluyentes de la dictadura separatista catalana con un lema que dice en legua regional: "Un país (Cataluña) de todos, una escuela solo en lengua regional, el catalán", 'Un País de Tots, L'escola en català'. Firman como lema de su manifestación que recorrió las calles de Cataluña el pasado mes de junio de 2014. archivo Lasvocesdelpueblo.

En Cataluña, la primera precaución en los centros escolares para el departamento de Enseñanza del gobierno separatista del presidente Artur Mas Gavarró es que todos los niños estudien solo en catalán y el resto, ya veremos más tarde. Son situaciones insostenibles que se arrastran desde hace tiempo, marcadas por las humillaciones, amenazas y agresiones. Los padres no ven otra salida que pedir ayuda a comisaría o en el juzgado. Incluso, para que se dicte una orden de alejamiento. Así ha explicado Rosa Negro, Subinspectora y jefe de la Unidad Regional de Proximidad y Atención al Ciudadano (URPAC) del cuerpo de Policía catalana, ‘Los Mossos de Escuadra’, en la provincia de Gerona (Cataluña), este lunes, 10 de agosto, en declaraciones a la agencia catalana de noticias. Negro lamenta que cada mes que pasa en la comunidad autónoma de Cataluña, Los Mossos de Escuadra de Gerona reciben más de quince denuncias de padres maltratados por los hijos, incluso, ha dicho Negro, para que se dicte una orden de alejamiento de aquellos niños catalanes. «Se produce insultos – en casa- amenazas graves, destrucción de bienes del domicilio, en mucha ocasiones para intimidar -a los padres-; son golpes a las puertas de la casa, romper los cristales con la intención de intimidar a los padres», explica la subinspectora de policía catalana. «También tenemos casos de agresiones físicas», ha añadido Negro, como «puñetazos y amenazas con armas blancas: cogen cuchillos, cúter y agarrar al progenitor y amenazarle a muerte», ha explicado Negro. <Fotografía: Simpatizantes de la plataforma separatista catalana ‘Som Escola’ en catalán solamente fundada por Muriel Casals Couturier del colectivo Ómnium Cultural y número 2 de la candidatura ‘Juntos Por El Sí’ al 27-S; durante una manifestación el pasado años 2014. Foto/Som Escola>.

Rosa Negro: «¿Qué es lo que nos llega a la policía -catalana-?, a la policía -catalana- nos llega lo que ya es insostenible, son situaciones que los padres -catalanes- llevan ya tiempo aguantando. Eso es un proceso, y es cuando estos padres -maltratados- ya no saben como resolver el problema» porque «hay realmente» mucha «violencia y ellos no ven el final», entonces «es cuando los padres se deciden presentar una denuncia» a la comisaria


Llegar a denunciar el propio hijo y pedir que se le imponga una orden de este tipo no es fácil. A menudo, estas situaciones de violencia quedan recluidas en el hogar y los padres las padecen en silencio. Pero cuando los malos tratos se convierten en el día a día, la situación ya se ha escapado de las manos y se sienten atemorizados, hay progenitores que hacen de tripas corazón y se atreven a ir a comisaría.

La jefa de URPAC de Gerona: «Se produce insultos – en casa- amenazas graves, destrucción de bienes del domicilio, en mucha ocasiones para intimidar -a los padres-; son golpes a las puertas de la casa, romper los cristales con la intención de intimidar a los padres», explica la subinspectora de policía catalana. «También tenemos casos de agresiones físicas», ha añadido Negro, como «puñetazos y amenazas con armas blancas: cogen cuchillos, cúter y agarrar al progenitor y amenazarle a muerte», ha explicado Negro.  

Rosa Negro: «Los agresores» jóvenes catalanes «son de mayoría chicos», ha dicho la subinspectora de los Mossos de Escuadra de Cataluña (Gerona). «De hecho», ha añadido, «3 de cada 4» de estos agresores «son chicos. Además, a menudo, los chicos hacen el maltrato físico» mientras que las agresores «chicas hacen el maltrato psicológico»

Negro pide a los padres catalanes no perder la esperanza y denunciar los hechos porque, ha dicho la subinspectora, «hay muchos padres que están en la misma situación». Por eso, ha dicho, «en caso que no podemos controlar y no sabemos como resolver el problema, no hay que tener miedo y buscar la solución por vía judicial y si es necesario», ha añadido Negro, «pedir un orden de alejamiento porque en algunos casos es la única manera de resolver el problema», ha subrayado Negro. «Si se da carta blanca» a las agresiones de estos niños catalanes, ha explicado Negro, se puede complicar el problema. «Los padres» maltratados «deben saber que hay muchos padres catalanes en la misma situación», ha puntualizado Negro.

La agente de policía catalana señala que cuando los padres denuncian a la hija, suele ser por maltrato psicológico. En cambio cuando los padres denuncian al hijo, suele ser por maltrato físico. Son jóvenes de 14 a 25 años, ha dicho Negro, que a menudo consumen alcohol o droga y que exigen dinero a los padres. Para conseguirlos, no dudan en intimidarlos destrozando mobiliario o utilizando violencia, tanto física como verbal. En la mayoría de las denuncias (tres de cada cuatro) el agresor es un chico.

«Los agresores» jóvenes catalanes «son de mayoría chicos», ha dicho la subinspectora de los Mossos de Escuadra de Cataluña (Gerona). «De hecho», ha añadido, «3 de cada 4» de estos agresores «son chicos. Además, a menudo, los chicos hacen el maltrato físico» mientras que las agresores «chicas hacen el maltrato psicológico» a los padres. «pero», ha destacado la agente,  «hay casos de maltrato físico» que «también» hacen las agresoras «chicas» catalanas.

La subinspectora Rosa Negro, jefe de la Unidad Regional de Proximidad y Atención al Ciudadano (URPAC), señala que siempre suele haber una serie de factores que se repiten. De entrada, que la situación de violencia no ha aparecido de golpe, sino que es consecuencia de un deterioro gradual de la relación con los hijos, que aniquila por completo la autoridad paterna.

Por eso Rosa Negro pide a los padres buscar siempre durante la educación de su hijos «un equilibro entre la tolerancia y la disciplina» en casa y «entre la recompensa y la sanción», ha dicho la profesional. «Es verdad que debemos felicitar nuestros hijos -en casa- pero cuando -de pequeños- se equivoquen debemos castigarlos», ha explicado la agente de policía catalana. «Debemos hacer las dos cosas» durante la educación de los hijos. «Ser padres no quiere decir jugar el papel de protector ni excesivamente permisivos».

En este sentido, Rosa Negro, considera «muy importante trabajar -en casa- la tolerancia y la frustración. Hay hijos a quienes se les han dado absolutamente todo -de niños-. Y es que » la realidad será totalmente diferente cuando llegue «la adolescencia, la juventud o la etapa adulta»,  ha lamentado. «No podrán tener todo», ha dicho Negro.

«Por tanto» ha considerado la subinspectora, «es bueno también frustrar a un niño en casa. Le estaríamos educando» con una herramienta «útil» cunado llegue la «etapa adulta». Además, Negro, ha explicado que sin no hay auto control» por parte de los niños «es porque alguna cosa está fallando» y los padres deberían averiguarlo de inmediato.

Asimismo, la subinspectora Rosa Negro recomienda a los padres catalanes estar atentos con quienes pasen el día sus hijos. «Hay que controlar las salidas de casa; los amigos, debemos saber con quienes van nuestros hijos; las horas de vuelta en casa», sin tener en cuenta lo que hacen los hijos de los vecinos», ha dicho Negro.

La profesional cree que el «consumo de drogas, alcohol, en muchos casos» es le denominador común» pero, «también nos encontramos con trastornos mentales que ya venían de atrás o que derivan de estas adicciones«, dijo. «La fuente de conflicto con los padres a menudo es por motivos económicos, porque necesitan dinero», sentenció.