Redacción.- Madrid (España), viernes 28 de octubre de 2022. «Después de casi cuatro años de bloqueo del Partido Popular (PP) a la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), provocando una crisis institucional sin precedentes, parecía que, esta vez el PP había entendido por fin la gravedad de la situación». Esta ha sido la primera reacción oficial del principal partido de la coalición gubernamental socialcomunista de España, Partido Socialista Obrero Español —con secretario general el actual presidente de Gobierno de España, Pedro Sánchez Pérez Castejón— después de que los negociadores del PP se levantaron anoche de la Mesa de la Traición al Poder Judicial del Reino de España, alegando «compromiso» del PSOE y su líder Sánchez con «el independentismo» y el Procés, en marco de la «reforma del delito de Sedición» con una rebaja a la mitad de las penas que ha planteado el Ejecutivos de coalición del PSOE y Unidas Podemos (Partido Comunista de España, Podemos, Izquierda unida), apoyado en separatistas y bilduetarras.
En un comunicado, el PSOE asegura que: «Feijóo y el propio Pedro Sánchez tenían sobre la mesa un acuerdo para poner fin al bloqueo y que diera pie al normal funcionamiento del órgano de gobierno de la Justicia».
«Sin embargo, cuando lo último que faltaba para llegar a un pacto era plasmar en él la firma, el Partido Popular inició la semana titubeando ante las presiones que Núñez Feijóo estaba recibiendo, tanto de fuera como de dentro de su formación», apuntan desde el PSOE.
Los socialistas denuncian que: «Bastaron solo un artículo de opinión y una advertencia de la presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Natividad Díaz Ayuso, para que Feijóo incumpliera su palabra y con ello la Constitución».
«Feijóo no lidera el Partido Popular»
«Alberto Núñez Feijóo no ha sabido aguantar la presión y ha claudicado ante la derecha política y mediática más radical y peligrosa», dicen los de Sánchez.
Para el socialismo, «la derecha que no reconoce la legitimidad de un Gobierno democrático nacido de las urnas ni la Constitución cuando no les beneficia».
«Ha quedado demostrado que Feijóo no lidera el Partido Popular. No ha sabido imponer su criterio a los sectores más conservadores de su formación política. Le han echado un pulso y se lo han ganado. Como ya ha ocurrido en anteriores ocasiones, como con el plan de ahorro energético, Ayuso le ha vuelto a marcar el paso a Feijóo», dice el PSOE.
Concreta el PSOE que: «Al líder del PP se le ha acabado definitivamente el crédito».
«Ni es el político de Estado que nos han querido vender ni tiene las fuerzas suficientes para liderar su propio partido. Nos encontramos frente a un político débil ante intereses oscuros muy alejados del interés general», apuntan.
Abundan que: «Demostrada su fragilidad, cabe preguntarse si alguien que no consigue poner orden dentro de sus filas puede tomar las riendas de un país en una situación tan volátil y marcada por tanta incertidumbre internacional».
El PP está instalado en el negacionismo de Pablo Casado Blanco
El PSOE dice que: «Cabe preguntarse también si un líder y un partido que incumplen sistemáticamente la Constitución y deterioran las instituciones pueden dirigirlas».
«Ni siquiera las advertencias y peticiones de la Unión Europea sobre este asunto pesan más en la decisión de Feijóo que las presiones recibidas internamente. Esta misma semana, la Comisión Europea volvía a recordar su posición, una renovación ‘con carácter prioritario’ del Consejo General del Poder Judicial».
«Al igual que con el debate energético, Bruselas no atiende las manipulaciones ni las difamaciones del PP sobre España», señalan los socialistas.
Dicen que: «El Partido Popular sigue instalado en el mismo negacionismo al que le llevó» el expresidente del PP, «Pablo Casado Blanco».
«La derecha continúa con su actitud corrosiva hacia instituciones fundamentales para el normal funcionamiento democrático del país» -dicen y añaden- «con la excusa de esta semana, son ya veinte los motivos diferentes que el PP ha esgrimido para no renovar el CGPJ».
Apuntan que: «Las discrepancias entre el partido de gobierno y el que lidera la oposición no pueden servir para justificar que no se cumpla lo que es un mandato constitucional».
Asimismo, los socialistas quieren dejar claro que «cumplen la Constitución; siempre, cuando gobernamos y cuando estamos en la bancada de la oposición».
«Las discrepancias respecto a los recortes y los casos de corrupción que asediaban al PP de Rajoy no fueron excusas para que en 2013, el PSOE se negara a cumplir la Carta Magna con respecto al Poder Judicial», recuerdan.
Sentencian que: «Casi una década después de aquella renovación del CGPJ, la última que se ha producido, el PP debe responder qué teme en el cambio de los jueces elegidos durante la etapa de Mariano Rajoy Brey al frente del Gobierno» de España.
