Agencias – Pedro Sánchez trasladará a Mariano Rajoy Brey el rechazo a su investidura y a negociar. El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy Brey, se va a reunir hoy en el Congreso de los Diputados con el secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez Pérez-Castejón, con quien va a cerrar la ronda de contactos con los partidos con vistas a intentar su investidura a finales de julio o principios de agosto. Madrid (España), miércoles 13 de julio de 2016. Fotografía: El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy (i), y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, reunidos en el Congreso de los Diputados. Archivo Efe.
Sánchez va a trasladar a Rajoy que el PSOE votará en contra de su reelección, como acordó el Comité Federal
El encuentro entre Rajoy y Sánchez (11.00 horas) tiene lugar después de que el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, haya abierto la puerta a la abstención de su partido para que el PP pueda gobernar en minoría. Sánchez va a trasladar a Rajoy que el PSOE votará en contra de su reelección, como acordó el Comité Federal el pasado sábado con el respaldo de todos los barones socialistas. Al contrario que Rivera, Sánchez no está dispuesto a ceder y está empeñado en mantenerse firme en su negativa a Rajoy a pesar de la postura de algunos barones socialistas, como el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, o del expresidente Felipe González de no descartar una abstención de última hora. Rajoy recibió este martes el «NO» de Unidos Podemos.
El secretario general va a rechazar hoy abrir una mesa de negociación con el PP, aunque con el propósito de «escuchar» y de que Rajoy le explique «con quién y sobre qué» pretende sacar adelante la investidura. Sánchez hará hincapié en que el PP es el que tiene que llevar la iniciativa y negociar el apoyo de otros partidos más afines, en vez de poner el foco en el PSOE para que facilite su gobierno. Rajoy se reunirá con Sánchez siendo consciente de que su propuesta de una gran coalición no tiene futuro y esperando que los socialistas actúen con responsabilidad y, después de los resultados del 26 de junio, le permitan gobernar en minoría
Eso pasaría por una abstención en la votación de investidura, una posibilidad que el PP sigue creyendo posible pese a la actitud de Sánchez. El jefe del Ejecutivo en funciones, según fuentes de su entorno, prevé hacer hincapié en su entrevista con el líder del PSOE en que la única alternativa a la abstención son unas terceras elecciones. Y le insistirá en la necesidad de que a primeros de agosto a más tardar, España cuente con nuevo gobierno para aprobar tanto el techo de gasto como los presupuestos del próximo año.
No se prevé que en la entrevista analicen cuestiones concretas sobre las que podrían ponerse de acuerdo a o largo de la legislatura porque en el PP se recalca que se trata de una primera ronda de contactos para sondear la disponibilidad de los diversos grupos a facilitar la gobernabilidad. Al término de la ronda con Sánchez, Rajoy va a enviar a los diversos partidos un documento con los objetivos y propuestas de reformas que pretende consensuar.
Los ejes de ese documento los expondrá, previsiblemente, en la comparecencia que tiene prevista ante los periodistas después de la que lleve a cabo Sánchez. La reunión de hoy es la tercera que el presidente del Gobierno en funciones y el secretario general del PSOE mantienen desde las elecciones del 20 de diciembre. La primera fue en el Palacio de la Moncloa, tres días después de los comicios, a iniciativa de Rajoy y duró algo menos de 45 minutos.
Posteriormente, el 12 de febrero, tuvo lugar el segundo encuentro, esta vez en el Congreso y con Sánchez como promotor después de recibir el encargo del Rey de intentar formar gobierno. En esa cita, que apenas duró media hora, Rajoy y Sánchez no se estrecharon la mano ante los medios gráficos y prácticamente no se cruzaron la mirada.
Sánchez insistirá en que el PP es el que tiene que llevar la iniciativa y negociar el apoyo de otros partidos más afines en vez de meter presión al PSOE
El secretario general del PSOE transmitirá mañana al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, su disposición al diálogo, pero no a abrir una negociación, al ratificarle que los socialistas votarán en contra de su reelección, como acordó el Comité Federal el pasado sábado. Sánchez acudirá a la reunión convocada en el Congreso con el propósito de «escuchar» y de que Rajoy le explique «con quién y sobre qué» pretende sacar adelante la investidura, han informado a la agencia española de noticias Efe fuentes socialistas. El secretario general insistirá en que el PP es el que tiene que llevar la iniciativa y negociar el apoyo de otros partidos más afines en vez de meter presión al PSOE para que facilite su gobierno.
«Le toca a él. Es su trabajo. Que se arremangue y se ponga a buscar apoyos», han apuntado las fuentes de Ferraz. El secretario general hará ver a Rajoy que «tan importante es la investidura como la gobernabilidad», por lo que no solo es preciso superar el rubicón de su reelección, sino labrarse mayorías para dar estabilidad al gobierno. Al contrario que el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, Sánchez no está dispuesto a abrir la puerta de una posible abstención. Está empeñado en mantenerse firme en su negativa a Rajoy a pesar de la presión de algunos barones socialistas, como el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, de no descartar una abstención de última hora.
El portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, ha asegurado hoy que, si tras un primer intento frustrado de Rajoy a finales de julio o principios de agosto dispone de una segunda oportunidad en septiembre, los socialistas votarán en contra igualmente. «Si después de dos votaciones fallidas Rajoy se presenta a una nueva investidura porque el jefe del Estado se lo encarga, (el voto) será que no», ha dejado claro Hernando en declaraciones en el programa «Al rojo vivo» de La Sexta. Al ser inflexible la postura, Hernando ha remarcado que Sánchez escuchará a Rajoy con «mucho respeto y atención», pero le comunicará que no tiene ninguna intención de abrir una mesa de debate entre el PSOE y el PP.
«Iremos a escuchar y dispuestos a dialogar, no a negociar. Porque se negocia con partidos que no son la alternativa. Nosotros estamos en la oposición. Ciudadanos no es la alternativa al PP», ha comparado Hernando tras el anuncio de Rivera de que van a estudiar una abstención. Al contrario que Hernando, el secretario de Organización del PSOE, César Luena, no ha querido pronunciarse sobre la posibilidad de que haya terceras elecciones o que haya una abstención «in extremis». «Cada cosa en su momento», ha dicho Luena tras asistir a un curso de verano en San Lorenzo de El Escorial (Madrid).
El número dos del PSOE ha subrayado que el líder del PP debe esforzarse y explicar qué quiere hacer y una vez que pase la reunión de mañana, será cuando se darán a conocer los próximos pasos de los socialistas. También se ha pronunciado hoy el exvicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra, para quien algunos partidos, entre ellos el PSOE, viven en la «contradicción» de sostener que ni apoyarán a Rajoy, ni permitirán terceras elecciones. En opinión de Guerra, estos partidos deberán elegir «lo uno o lo otro».
