Artur Mas reconoce que lideró «una rebelión» contra España el pasado «9-N» 2014

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Redacción y Agencias – «Me confieso democráticamente rebelde ante el Estado Español para no dejarnos poner las urnas» del referéndum de autodeterminación de Cataluña para ser un país libre. «La querella por el 9N es la reacción de un Estado -Gobierno del PP de Mariano Rajoy Brey- herido en el orgullo, rabioso, torpe, que hará todo lo posible para cargarse me». «No tengo vocación de mártir ni héroe. Intento ser un humilde servidor de» de esta nueva Cataluña que estamos construyendo. «Si la democracia es uno de los pilares de la construcción europea, el clamor democrático de Cataluña debe ser reconocido por Europa«. «No admito que seamos el Gobierno de los recortes». «Somos un Gobierno que ha administrado los recortes del Gobierno español -del Partido Popular- de la mejor manera que ha podido». Así ha reconocido esta miércoles el diputado electo de la candidatura Juntos Por El Sí (JxSí) al 27-s, Artur Mas Gavarró, tras el fracaso de su plebiscito para hacer la Declaración Unilateral de Independencia de Cataluña (DUI) y además poder conseguir la mayoría suficiente en escaños -68 escaños- para gobernar solo con diputados de su candidatura sin contar con los extremistas de la batasuna catalana CUP que lidera Antonio Baños Boncompain.  por primera vez, Artur Mas reconoce oficialmente que el 9N fue un golpe de Estado y utiliza la palabra «rebelión» contra España, quizás porque está entre las cuerdas -no poder ser investido presidente o porque tiene ahora que asumir el discurso de los extremista de CUP para ser investido. Increíblemente, Artur Mas reconoce la derrota de su plebiscito afirmando que no «llegaron a los 50% de votos» pero añade que «tenemos -(JxSí) y CUP)- más gente que votaron Sí que gente que votaron NO», increíble pero lo ha dicho Artur Mas Gavarró. Barcelona, 30 de septiembre 2015. <Fotografía: Artur Mas Gavarró durante la entrevista esta mañana en Cataluña Radio>.

Artur Mas ha asegurado sobre su imputación por haber puesto las urnas el 9N, que «legalmente no desobedecí», sino que «fue un gran acto de plantarse ante el Estado y de rebelión democrática», por eso ha confesado  que él fue «rebelde ante el Estado de Derecho», español. 

En una entrevista en el programa La mañana de Cataluña Radio, el delincuente Artur Mas Gavarró ha puntualizado que no hubo desobediencia legal de la resolución del Tribunal Constitucional, para que éste no había especificado qué actuaciones debían suspender, pero ha insistido en que «políticamente hubo en Cataluña una rebelión democrática contra el Estado español». «Se salvaron todo los obstáculos, plantamos cara, pusimos las urnas y 2.350.000 personas fueron a votar» y con esta respuesta se ha mostrado convencido de que el gobierno separatista excluyente de Cataluña «estuvo a la altura de la aspiración» separatistas catalanas.

Tras advertir que su vocación no es «ni de mártir ni de héroe», el diputado electo al 27-s de JxSí ha alertado de que si llega a ser inhabilitado como consecuencia de la querella mientras Cataluña siga estando sujeta al ordenamiento jurídico español, «hay habrá consecuencias legales y lecturas políticas «. Y, en este sentido, ha recordado que pese a que el Consejo Fiscal de Cataluña concluyó que no había motivo para esa querella, la Fiscalía General del Estado obligó a presentarla, lo que ha calificado como «una reacción de un estado orgulloso, rabioso, torpe e incapaz de dialogar «y se mostró convencido de que» hará todo lo posible para ver si se me puede cargar a mí también».

Por todo ello, este hombre catalanista excluyente dijo que hay «una respuesta política» en Cataluña y se mostró convencido de que si los resultados del domingo pasado avalan que «no nos interesa como país seguir sujetos a este ordenamiento jurídico que nos puede llevar a estas situaciones absolutamente ridículas, lo que tenemos que hacer es cambiar de marco». El líder del partido corrupto catalán de los 3% de comisiones y con 15 sedes ya embargadas por corrupción universal ha asegurado también que el 27 de septiembre «fue el aval democrático del 9 de noviembre del año pasado» y ha añadido que «las querellas están superadas» por los comicios del pasado domingo 27 de septiembre en Cataluña «desde un punto de vista político» y del ambiento social en cataluña.

Artur Mas, también, se refirió al resultado de las elecciones del 27-s y al proceso de negociación que se abre para conformar un nuevo gobierno autonómico en Cataluña con los extremista de la batasuna catalana -que también son amigo de los extremistas vasco amigos de los terroristas asesinos ETA- De hecho, AMAIUR acompañó los candidatos de CUP durante esta campaña electoral del 27-s [Ver aquí].

Artur Mas reconoce finalmente el fracaso de su plebiscito del 27s

En este sentido, el jefe del Artur Mas se congratuló de la participación masiva en las urnas y ha asegurado que «el resultado se debe administrar con cohesión en Cataluña y concordia con España, a la que no deseamos ningún mal«, pero reclamó» no olvidar lo más importante y es que tenemos un mandato del pueblo de Cataluña, con mayoría absoluta larga en el Parlamento, para llevar adelante el proceso».

Artur Mas ha asegurado que, a pesar de no llegar al 50% de los votos, «tenemos más votos SÍ que votos NO claramente, casi 400.000 más, y muchos más diputados»; por ello, ha resaltado que «la minoría debe ser tenida en cuenta, pero no puede bloquear el deseo de la mayoría».

El líder del partido corrupto catalán ha dejado claro que «aplicaremos la hoja de ruta con diálogo, tenemos que hablar civilizadamente entre todos los que perseguimos un mismo objetivo», porque, «no hemos llegado hasta aquí, con lo que nos ha costado, por estropearlo, yo no lo haré si puedo». Mas ha reclamado que «entendamos que estamos en una etapa histórica de este país, que nuestra generación tiene una responsabilidad que no tiene precedentes, que de lo que hacemos nosotros ahora, dependen muchas cosas para mucha gente para mucho tiempo, y no podemos fallar».

«Tenemos un proyecto, un propósito y un compromiso y tenemos que salir adelante», continuó diciendo, y añadió «somos suficientes para hacerlo, no tantos como hubiéramos querido, todavía no, pero yo tengo la esperanza de que éstos al final acabarán estando». Por ello, el presidente ha abogado por «proteger por encima de todo» la hoja de ruta porque si no «volveremos al esquema autonómico, y esto quiere decir que cualquier gobierno que haya en Cataluña, cualquiera, deberá aplicar las recortes que imponga Madrid».

En cuanto al Gobierno del partido Popular de Mariano Rajoy Brey, Mas ha alertado de que este «actuará con todos los instrumentos para abortar lo que está pasando en Cataluña», y dirigiéndose a la CUP ha avisado de que «no podemos dar el más mínimo margen para el desacuerdo en Cataluña, porque lo que está en juego es demasiado importante para que no haya un acuerdo esencial».

En este sentido, el presidente en función de Cataluña ha recordado que «hay que respetar el mandato democrático», ya que «más de 1.600.000 personas votaron Juntos el Sí sabiendo que yo era candidato». «La CUP es necesaria para llevar adelante la hoja de ruta y se debe hablar de todo con ellos, pero pueden influir de acuerdo con su proporción, JxSí ha sacado casi el 40% de los votos», remachó.

Artur Mas ha insistido en que «tendremos la mejor actitud del mundo» a la hora de hablar, pero ha pedido que sea a partir de propuestas realistas. «Ahora toca sentarse y hablar tranquilamente, debatir argumentos y contraargumentos», añadió.

Además, subrayó que «hemos hecho una política sensible, priorizando salud, enseñanza y servicios sociales, que tienen más porcentaje que nunca»; por ello, se ha mostrado contundente al afirmar que «no admito que nos digan que somos el Gobierno de los recortes», y añadió «hemos administrado los recortes que nos han impuesto desde Madrid de la mejor manera que hemos sabido , con la máxima sensibilidad social, y hemos desobedecido sistemáticamente los déficits impuestos por el Estado».

Preguntado sobre qué quiere pedir en Europa después de los comicios, Artur Mas ha respondido que «sobre todo, a que tomen nota de un pueblo que ha querido votar, que se le ha impedido votar por todos los medios, que ha hecho esta rebelión democrática, y ha ido masivamente a las urnas», y lo ha hecho, ha explicado, «de forma absolutamente civilizada, y con una movilización y persistencia por querer votar sobre el futuro del país que no tiene precedentes en Europa».

Y concluyó «si la democracia es uno de los pilares, si no el más importante, de la construcción europea, en Cataluña hay un clamor democrático para poder sacar adelante el futuro político del país, y esto necesita ser reconocido también por Europa porque, insisto, estamos hablando de unos de los pilares de la construcción europea».

Un «clamor» separatista catalán que fracasó también «claramente» el 27-s; derrotado en «las urnas» por los catalanes oprimidos por el régimen de Artur Mas y no por el Estado Español. Eso que sí es verdad y con número: (JxSí y CUP)  perdieron claramente el plebiscito separatista catalán del 27-s con: 47,8% de catalanes vota por el y el 52,14% por el No. Artur Mas no se ha atrevido a decir que son también los catalanes que le derrotaron en las urnas el pasado domingo 27 de septiembre 2015.

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